domingo, 20 de noviembre de 2011

André Viard en Vall d'Uxó.


Cuando llega el invierno se termina la temporada taurina y se realizan numerosas charlas ambientadas en el mundo del toro. Habrán algunas mejores y otras no tanto. De todas ellas aprendes alguna cosa más. Puede ser que vayas a ver  una conferencia de un ganadero junto con un torero, salgas decepcionado y al día siguiente te quites esa espinita que te han clavado doblada al escuchar las sábias  y claras palabras de un aficionado francés como es André Viard.

Cuidado donde nos quieren llevar los taurinos que van por delante en esto de los toros (empresarios, toreros, etc), con el tema del monoencaste, su evolución de la fiesta refiriéndose a que evolucionar es suprimir la suerte de varas y demás temas que supongo que a el aficionado que sigue la temporada no le hace ni pizca de gracia.

Vamos a lo que íbamos, la charla de ayer no ha sido nada del otro mundo. No voy a descubrir quién es André Viard, un aficionado romántico de los toros. Que piensa en eso, en aficionado y sabe contar lo que piensa. Todos conocemos su trabajo, Terres Taurines. Durante la charla se habló de todo tipo de puntos que engloban nuestra fiesta de los toros. La charla duró dos horas, a mí personalmente se me hizo corta. Se pudo disfrutar de un profesional con el que mayormente coinciden numerosos aficionados.  De su intervención voy a destacar varias opiniones que tiene y que me gustaría trasladarlas a todos vosotros:
- La historia de la Tauromaquia es el torero quien se adapta al toro, no el toro se adapta al torero.
- Muchos ganaderos no crían lo que quieren, sino no venderían nada.
- Antes presumías de la cabeza de camada y ahora los tienes que esconder cuando vienen los veedores, los toreros no los quieren. Se lidia el medio toro para abajo, excepto Bilbao, Madrid y Pamplona.
-Defender la cultura es hacer el espectáculo cultural, empezando que la figura del toreo mata la cabecera de la camada, que son  una o dos corridas de esas ganaderías que algunos de ellos no conocen (Cuadri, Dolores Aguirre, Adolfo Martín...). Estos ganaderos no quieren ganar dinero, quieren que se lidien su dos o tres corridas que tienen, ya que son camadas muy cortas. Las figuras van a triunfar igual. Esta sería la primera base de la fiesta.
- El único torero que aporta dimensión diferente es José Tomás, es el único que llena las plazas.
- Ahora la fiesta está mucho en las manos de las figuras.

Sobre si Francia es pionera en cuanto a la fiesta y es un ejemplo a seguir, André Viard continuó siendo claro:
- El mundo profesional taurino tiene mas libertad, menos fuerza en cuanto a políticos, no se pueden imponer como en España a la hora de confeccionar carteles.

Sobre la reducción del 20% de los honorarios a las figuras en Francia, su opinión fue la siguiente: en Francia el 70% del presupuesto de una feria se lo llevan los toreros, el 30% son para ganaderos, empleados de la plaza y demás gastos de la Feria. Es normal que se quite de donde más hay, no le vas ha rebajar el salario al empleado de la plaza... Existen dos tipos de temporadas: 

La primera, va todo a favor del torero, y la segunda es la de plazas de segunda, poco dinero, toros mas grandes, toreros de otro caché. En este tipo de segunda temporada es donde encontramos todos los fundamentos de la fiesta. Hay que procurar que la fiesta de las figuras no decaiga el toro.

Otro tema importante que es la poca juventud que hoy en día se encuentran en las plazas de toros, André tiene esta opinión:

- Hay mucha comunicación en contra, se dirige a la juventud y el mundo del toro no se dirige a ellos. Hay generaciones perdidas. Nos tenemos que dirigir a ellos.

En cuanto a la desaparición de encastes y posibles soluciones tubo una respuesta rotunda que fue lidiarlos. - Hay que lidiarlos. Estas ganaderías no tienen 2 o 3 corridas al año, que se pueden lidiar mientras que Cuvillo puede tener 30. Si juntamos la producción de todas la ganaderías de los Opus que he pulicado no llegan a la producción de Cuvillo. Estos ganaderos prentenden defender su patrimonio. A los toreros no les gustan, pero si entre todos las matan al final se salvarán. 

Y ya por último en cuanto al público que hoy en día va a la plaza dice: -hoy se va a ver al torero, no se va a ver la lidia.

Estas fueran algunas opiniones que recogí, y en las cuales creo que  hay gran número de personas que están muy de acuerdo. Se puede hablar o decirlo mas alto pero no mas claro.

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